De cromo níquel.
Mis versos
tornan metálicos
no
encuentran sabor a miel;
esdrújulos
sintomáticos
hoy repudian
lo fantástico,
no inspiran
sueños de ayer.
No es hora
de tener sueños,
es hora de
andar despiertos
visualizar
los empeños
de toda
inmunda canalla
generadora
de entuertos.
Mis versos
marchen marciales
alejados de
lo gótico;
y en mis
renglones leales
manifiesten
mis pesares
por el
estado caótico:
que sufre
esta piel de toro
a merced de
todo mal.
Todo el mal
que hay en el lodo
donde
chapotea el cerdo
hozando lo
irracional:
multiplicando
plantillas
comandando
ejecutorias:
sin rubores
mis quintillas
hoy a tantos
granujillas
los retrata
disuasoria.
Fernando naranjo
duran
7-4-2018
No hay comentarios:
Publicar un comentario