viernes, 2 de abril de 2021

contaminación

Contaminación. (Sin plan B) Si Benito Pérez Galdós, levantara la cabeza y viera que el sentimiento descrito en su famosa obra, hoy, después de inmersos en la imparable singladura el siglo XXI sigue manteniéndose en plena vigencia ¿qué podría comentarnos? Los intereses creados, son los más firmes y genuinos caracteres que comandan la vida de un gran tanto por ciento de la ciudadana que puebla el orbe mundial, y de ahí que los cacareados cambios climatológicos lleven el sello inmortal de los inamovibles “intereses creados” motor dinámico que mueve la tierra a merced del apetito financiero de los grandes capos, de las grandes mafias, al servicio de sus carniceras fauces. La “contaminación” es hoy, su caballo de Troya para invadir pueblos y estados títeres. Prueba fehaciente, la facinerosa fabricación del coronavirus, que fue creado y bautizado por el politburó asiático con nombre de varón, pero al irrumpir en nuestra península ibérica, comandada por grandes grupos feminazis, fue por obligado cumplimiento que el Estado en “función extraordinaria” autorizar su “trans” feminazi hasta llegar a ser “la Covid” Condición Sine qua non, y salvoconducto paramilitar en todo el territorio comanche’, antes Nacional. Siguiendo la senda vamos encontrando similitudes a toda vela, esa que mueve el sentimiento de la nueva extrema izquierda para encerrarnos y amordazarnos, a todo un país de estilo costumbrista y jaranero como es este nuestro. ¿Qué intereses comparte el actual Estado con esas grandes mafias para serles tan fiel? Nos ha cogido con el paso cambiado a una gran mayoría, la cual, ¿también abrazada a los mismos sentimientos y caracteres de “los intereses creados” pero sin Plan -B? Y ahora llega “el guarda de la viña” La Unión Europea que también protege sus “propios intereses creados” y jura y perjura que todo el dinero que preste, a todo Estado golfante tiene que ser devuelto en los plazos acordados. Los ejércitos troyanos han conseguido someter a todo un pilar económico y filosófico a sus nauseabundas leyes, y el cambio de orden mundial está servido. La burguesía tan popularizada de los pueblos ha sido satisfecha a costa de la honradez mundana y bragada “eucaristía” que supo traernos tiempos de bonanzas con el sudor de todos (o casi todos) los nacidos en la posguerra, e incluso de algunos padres de los hoy revolucionarios, los que en premio nos lanzan hacia este último valle de lágrimas, ¿y sin un bragado tutor a quien solicitar orden y clemencia, restableciendo el respeto pisoteado? El holocausto está servido; más, me temo que, los que somos hoy testigos de tal genocidio no veremos jamás un auténtico sumarísimo como aquel de Nuremberg. Sin una “cara - B” ha sorprendido a muchos en este país de quijotes y sanchos”, y solo escaparán de la férrea tenaza aquellos a quienes haya cogido con la billetera repleta” o a los bien afianzados, confirmados y bendecidos por las mafias que, en este convulso panorama, se suelen mover como serpientes en el lodazal de la vida turbulenta y barrio bajuna. De tal manera que, la hostelería, como el comercio menor, y por último el Planeta de la feria, sufrirán en sus carnes todo abuso y latrocinio en los puntos cardinales, en que los mueva ‘la rosa de los vientos’, aunque acostumbrados ya al modelo confiscatorio de las mafias volantes, ayuntamientos y juntas regionales, que con todo descaro disparan a matar, estos las han de pasar canutas. ¿Conseguirá la “Plandemia” y la mala fe, someter y acuartelar a mi querido planeta de la feria, entre monorrimos y estáticos, parques de atracciones? Nada que ver con la esencial y costumbrista trashumancia, que siempre llevó la frescura de lo imprevisto e impactante, llevando la luz y el color de la alegría a todos los rincones veraniegos de nuestra castiza geografía, allá donde celebrn ferias y fiestas en sus calendarios patronales. Fernando naranjo duran 30/03/2021