Perera

-al arcángel de la Puebla-

Ese acero fue el culpable

que quiso causar tu olvido

sobre aquella dura arena

en el quinto de la tarde;

más Iruña supo verte

de pletóricas maneras,

esenciales y toreras

ayer huérfanas de suerte.

Ay, Miguel Ángel tú del toro

con trapío casta y fuerza

guardián de los buenos modos

de reciedumbre y pureza.

Abogo por tus maneras

y el poder de tu muleta,

yo abogué por tu figura

que me trajo hacia estos medios

con vitola de poeta.

Hoy tu amigo el ganadero

No pudiera sacar pecho,

sin clase y falta de casta

no tomó debida altura

no le pagues la factura

aprieta su mano y basta!..

Fernando naranjo duran

11-7-2018