Toros de Santiago Domecq
Ferrera. Perera y G, Marín
Vuelvo en décima espinela
a la feria de Albacete.
Feria que siempre promete
aliños de sol y esperas;
clavos guindilla y canela
para una tarde de toros
donde la sangre y el oro
empañan su redondel,
cuando un bello rosicler
se despide de un cruel modo..
¿Qué corrida tan pareja
pareció de antiguamente?
Por hechuras fue exigente
y a esta plaza mudéjar
no pondré una sola queja;
si, a cambio todo alabanza,
por su equilibrio en balanza
sobre este candente albero,
fragua del temple torero
donde el duende es la constancia.
Comandó Antonio Ferrera
enfrentarse a buidos leños,
a un escuadrón extremeño
para encastada quimera.
Pues esta corrida austera
que sin ser aviesa y dura
pidió toreo de altura
a los tres extremeñitos;
valores que yo suscito
y aplaudo sin desmesura.
No hubo suerte en el sorteo
para Antoñito Ferrera,
pero Antonio en su quimera
depura el fino toreo
sorbo a sorbo, que lo veo
sin alharaca ni espuma,
toreo jondo rezuma
gobernando su muleta,
el deja su estampa quieta
más, ayer no hubo fortuna..
De valkirias preferido
este arcángel wagneriano;
lleva el poder en sus manos
y al burel como embebido
porque a sus telas cosido
van afilados cuchillos
y el aprieta los tornillos
para que bajen los humos.
Vive dios que así lo asumo
y ayer su acero dio brillos!
Cuajando va el de Jerez
con extremeña hidalguía,
parece una cruz de guía
de sus creyentes cimbel
marcando un compás tal vez
afianzado al infinito.
El torea despacito
y sabe mover las telas
acariciando la estela
de ese toreo exquisito..
fernando naranjo duran
15-9-2017
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