El tiempo te hace feliz
pero siempre tan aprisa
que aunque regale sonrisas
y reparta el porvenir
también nos hace sufrir
poniendo final a todo;
más, sin él, no hay acomodo;
siempre marcando la pauta
con esa mágica flauta
sonorizando periodos..
Qué puedo pedir al tiempo?
Que te acerque a mis umbrales
para que cures mis males
en mis noches de tormentos
a cambio de sentimientos
y de amor bien entendido?
Seré aquel fuego encendido,
el compás que tu esperabas
cuando de noche soñabas
con aliento enardecido..
Intentemos detener
y que observe la locura
de nuestro amor sin mesura
trasnochado, cual ayer;
que hoy nos vuelve a florecer
con finas hebras de plata
que se enredan y arrebatan
demostrando con salud
residuos de juventud,
que al tiempo ayudan y escapan..
fernando naranjo dura
29-10-2016
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