lunes, 16 de mayo de 2016

Crónica de una Zarzuela inacabada..


Siguen los desastres ganaderos sin atisbos de soluciones en esta icónica Plaza del toreo mundial. Siguen los `remiendos’ para presentar tarde a  tarde el material de bóvidos ante ese público fiel al extenso y taurino serial en este mes otrora florido ahora mayo lluvioso. 

El festejo de ayer sobre el tapete barajaba una jugosa escalera de color, una trilogía sin tachaduras ni enmiendas, tres conceptos distintos en un mismo ramillete torero por su frescura y aromas provenientes de continentes dispares aunque hermanos en espíritus toreros a través del Descubrimiento tan denostado él por esquemas y políticos razonamientos de ahora.


La corrida del alto Linaje se desmoronó en desdibujada presentación y conducta; filiación tan deseada por el desaparecido Conde del Asalto, heredero directo de la sangre Veragua vía Marqués de Domecq. Nada de nada para aquel supuesto arte pretendido por Juan Pedro, el que quiso mirarse en  espejo de Fernando Villalón. Otro soñador de azulados linajes en mi vieja Andalucía. Las cosa de las cosa (según Rafael de Paula) corrida que diera al traste con las ilusiones del confirmante de una vieja dinastía torera; Posadas de Maravilla..


Joven diestro pacense de exquisitas propiedades y enjundias toreras que se topara en su confirmación, con un mulo,  zancudo y desabrido; junto a un sexto (bis)  en tan larguísima obertura y con una lidia infame por parte de los gregarios, trabucaron los papeles en los fríos  de la noche madrileña; maridados  a su poco bagaje después  de su alternativa en la pasada feria de  Zafra, que no volviera  a enfrentarse a la peligrosa realidad de una fiesta sumida en  frecuentes altibajos;  hicieron el resto..


El ‘angelote de la impávida figura’ que en ningún momento rehúsa la confrontación con este nuevo “gallo kirico” del panorama taurino-hispano-hablante. Hoy como ya es norma en esta plaza no encuentra un burel con quien emplearse,  para de nuevo dejar ese regusto profundo de la belleza  muletera que se anida en su cintura de toreo “bolchevique” trazos en el semicírculo de la hoz donde  el martillo templa los  naturales en los yunques de su fragua..


De Roca viva, el  astro Rey;  llegado de agrestes y lejanas cordilleras; donde el sol es implacable, como su afán de ser líder, hoy entre dinastas de aquellos extremeños Conquistadores,  volvió a pretender con razones poner un pica  sobre arenas que ya le son familiares para sentar sus reales, este barbilampiño torero que viene con las del veri alucinando a las masas.. Dios le premie tan encomiable función como despertador  de soñolientos..

Fernando naranjo duran

16-5/2016

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