Hambruna sí, hambruna no.-
(Tras la Milana bonita)
Cuando ayer dieciséis de octubre fuera “el día internacional
de la alimentación” celebrado en más de 150 países, rezó a modo de slogan en un
medio periodístico de actualidad ¿Por qué se conmemora este 16 de octubre? ¿combatir el hambre global a partir de la
cooperación, entre otros objetivos?
No sé que decir a tanta felonía y al manoseo de dueños y
señores de dichos medios, todos o casi todos, en manos de las grandes firmas
políticas que gobernando el mundo no tratan de antecederse a las epidemias de hambrunas,
hoy tan fáciles de atajar por las grandes mejoras de la maquinaria y fertilizantes
al servicio agrario, con la desmesura de mano de obra existente en nuestro
país, (aunque mutiladas y perezosas) sometidas a los cantos de sirenas y a las migajas que les ofrecen los partidos políticos.
Engreídos gerifaltes, “gobernadores de todo a cien” y el bien productivo, por él
que se multiplican jalando de los esfuerzos que genera nuestro país,
Amén del desmedido sobrante africano y países del Este que importan
sin un mínimo control a pesar de la qué nos está cayendo por el desdén de nuestra
extrema izquierda. La que decide a base de someter a sibilinos impuestos a los
que sudan la camiseta, para socorrer a sus protegidos recién llegados en
pateras y aumentar sin decencia alguna sus propios sueldos y los que necesitan
para equipar sus legiones de “expertos” en vivir del cuento.
El hambre llama a nuestras puertas y aumentan los pedigüeños
para su dosis de coca o yerbas diarias, cuando de pronto se van incorporando
otros precarios, ya de mejor aspecto, a los que insospechadamente creías
encontrar, haciendo cola en un despacho de víveres, parecido (al “Auxilio Social” de nuestra posguerra) los veo
cuando salgo a pasear y subo, o bajo, por “el Angliru” que supone para mis
desgastadas fuerzas, desde la calle de la Sal, donde se erige la imagen del
insigne “Marqués de Porrinas” hasta la plaza Alta, de este Badajoz de nuestros
pecados.
¿Cómo es posible que esta sufrida región, la que al fin fue
tomada al ganarles la partida electoral a los caciques de antaño; gloriosamente
liberada por el pujante ejército heredero soñador de la antigua república, en
la que llevan instalados más de cuarenta años, y hoy pueda pasar por estos
capítulos que prologan ¿sin dios no media? hambrunas y el caos más profundo desde
el final de aquella guerra maldita entre los de su misma sangre.
No logro olvidarme de aquella época de posguerra aquí en
Badajoz cuando solo era un niño, allá por avenida Carolina Coronado subiendo a
mano izquierda, ya cerca de la estación de ferrocarril, ir con los míos al “Economato”
almacén de víveres para la ciudadanía
pacense, donde acudían aquellos camiones “Chevrolets” chatos “tipo guerra” que prestara la base aérea de Talavera
-Badajoz para suministrar a este pueblo, necesitado entonces, donde felizmente
cree mi familia, y plácidamente habita hoy mi díscola madurez.
¿Cómo no ha sido posible ese PROGRESO que tanto cacarean los
gallos y gallinas de este corral? ¿En qué se están entreteniendo? ¿Solo en marear
la perdiz entre dimes y diretes, encendiéndoles la sangre a todo dios? ¿o en
buscarse una “paguita” y colocar a los de su cuerda, con coche y casa en la
Playa, mientras el tren se avería o se incendia cada tarde que va o regresa del
Madrid de Florentino, o socialistas rencores? ¿Por qué aquella izquierda que defendió Miguel
Delibes, o esa tropa emergente, heredad de aquellos chozos, después millonarios
tras ocupar relevantes butacas de políticos glamurosos, siguen castigando hoy sus
caladeros naturales?
Solos entretenidos en desprestigiar al adversario, y de
reojo de cuando en cuando mirar por el retrovisor, por si al gallego” le da por
levantar la cabeza, y éste, está más fiambre que Carracuca; el general Prim o
el Espartero. Más miedo que vergüenza se gastan estas nuevas fuerzas políticas,
únicas responsables de los virajes que sufre el pueblo que los elige, para su mal
posterior.
Extremadura sigue gracias a sus hijos y a sus hijas, responsables,
tras su Milana bonita”…
Fernando naranjo duran
17/10/2020
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