Florencia.-

-a Florencia Soyo Fernandez-

Cercana la primavera

vuelas a la eternidad,

sin ver tu feria de abril

ni a tu carreta partir,

¡Viva voz de la Hermandad!

¿y tus trajes de volantes?

¿y tus viejas castañuelas?

¿Colgaran en los estantes

allá en tu nido-palacio,

ferianta de gen rociera?

¿Te vas sin decir a dios?

Sin despedirte de nadie,

sin tu alegre diapasón

por no causarnos dolor

en un largo pasacalle.

Encabezas mi carpeta’

de este marzo, dos mil veinte,

(la que inicio circunspecta)

al ver que tu singladura

se escoró hacia a la tangente.

Cruza etéreos caminos

hacia el espacio celeste,

en busca de aquellos tuyos

los que andarán hoy ansiosos,

por tenerte y atenderte.

Y a pesar de ser florida

y dotada por la gracia;

de romera y margarita

palaciega y tesonera

fue tu sencilla fragancia.

Sirena tú, de aquella Ola,

que hizo rico a Pepe el negro”

Donde nacen amapolas;

sendas de rubios trigales,

donde el Soyo tuvo feudos.

Hoy contigo se va una época

de feriantes con vitola;

por ti hoy resurge un requiem

y mis versos van de luto,

como los que a ti te lloran.

Fernando naranjo duran

01/04/2020