sábado, 1 de octubre de 2011

Otoños de sangre y oros..























Otoños de sangre y oros
-Madrid, asomado al cielo-

Sevillano ganadero
hoy mandó a repartir leña,
y en la arena madrileña
se las vieron dos toreros
sin buscar aliviaderos..
Estos no tienen padrinos
solo el viento del destino
los lleva cosido al lomo
¿No hay jamón? Tocino como
bajo este cielo divino!..

"fantástico" el salpicado,
un tío con toda plaza
largo y hondo que realza
la labor de un complicado,
pero un vasco ensangrentado
dijo.. Este terreno es mío!
Y despachó poderío
más a la hora de la muerte
Dios estuvo ante la suerte..
¡ Qué bien hiciste.. Dios mío!

Al segundo aquel caballo
lo castigaba indecente!
¿Un torero tan valiente?..
Y de clase, lo subrayo
lo digo y no me lo callo!
El cuarto fue farolero
mú despacháo y fulero
y el sexto se hizo "notario"
de peligro estrafalario
e hizo sufrir al torero!

Regresaba le emoción
y rumores de tragedia,
señores es cosa seria
el cazo de la ilusión
no siempre otorga razón
cuando menos va vacío..
Hoy anduvo muy sombrío,
los toreros dieron todo
sus ardores sin recodos..
¿Lo supo aquel graderío?..

Por que tanto navegar
nos va limando asperezas,
y nos otorga purezas..
Parar templar y mandar
sobre todo ilusionar..
Al aficionado añejo,
se le adivina a lo lejos
esperando sus migajas,
su corazón a rodajas
no sabe sentirse viejo..

Fernando naranjo
1-10-2011

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